Un Sueño Llamado Helen (Sexta y Última Parte)

 

Como es normal la paciencia de cada persona tiene un límite, y la paciencia de Brenda había llegado al límite, ya tener un amante para Brenda ya no significaba absolutamente nada para ella, había comprendido una verdad que la había dejado con su estima por los suelos, lo que estaba pasando su esposo Lorenzo era realmente algo que ni ella misma podía soportar, y es que el olvido era algo devastador, como si una helada espada te cortara todo contacto con un ser que has convivido durante tanto tiempo, era algo así como si hubiera llegado la muerte a tocar la puerta de su casa; la indiferencia de Lorenzo hacia su esposa Brenda, habían hecho meollo en su esposa, porque la indiferencia era el olvido total, a Lorenzo ya no le importaba si su esposa estaba allí o no, en lo que hacía con su hogar, si tenía un amante o no, etc. ya no le interesaba ni se preocupaba por su esposa, a Lorenzo todo le daba igual, prácticamente ya no movía un dedo por su esposa, a Lorenzo solo le interesaba sus sueños con Helen.
 A finales de Noviembre, Brenda empaco sus cosas en varias maletas, se rindió ante un sueño llamado Helen, Lloraba con amarguras y resignación, todavía no comprendía como los sueños pueden ser más poderosos que su propia realidad, y lo peor de todo, su amante tambien la había abandonado por una mujer más joven y hermosa; secándose sus lágrimas fue a darle el último adiós a su esposo Lorenzo, entró con un pañuelo que lo había humedecido de tantas lágrimas, y vio a Lorenzo durmiendo unido con su sueño con Helen... cerro la puerto y era mejor no interrumpir, entró una suave brisa en la ventana abierta de la habitación donde estaba durmiendo Lorenzo y se miraba la figura de su esposa Brenda cruzando el portal muy triste, con sus maletas y en su aliento diciéndole adiós a su esposo Lorenzo...en eso empezó a sonar una música en la radio que Lorenzo siempre mantenía encendida cuando dormida, y era de Air Supply con su bella melodía, Goodbye.....

 Helen estaba sobre el cuerpo de Lorenzo, ambos corazones estaban muy agitados y frenéticos, cuando Helen sintió algo diferente en la atmósfera de sus sueños, se ergio sobre sus bellas caderas dando un gemido ahogado, pero Lorenzo sujetaba las caderas de su amada fuertemente, sentía como si su mundo se acabará de un momento a otro y dio un grito ensordecedor; Helen dejó que todo terminara y se levantó poniéndose su ropa rápidamente, Lorenzo también se levantó muy asustado sin saber que era lo que pasaba - Pero que pasa Helen? Le pregunto Lorenzo- El cielo de los sueños se ha abierto mi amado, es hora que tú regreses al otro lado, le respondió Helen; pero Lorenzo temió lo peor, ya que la expresión de Helen era cortante y tajante, sin más explicaciones - no te quiero dejar Helen presiento algo muy malo ira ocurrir, le dijo Lorenzo, pero en esos instantes Helen volaba por los aires y Lorenzo la vio cuando Helen era succionada por el cielo, la vio como en el primer día que conoció a Helen, desnuda y con sus bellas alas.....
  Lorenzo despertó muy agitado en su habitación, era todavía de día con un sol resplandeciente y entrando una Briza  agradable por su ventana abierta, Lorenzo se sentó sobre su cama aturdido sin saber que exactamente había ocurrido con su amada Helen, no tenía sosiego, caminaba sin rumbo en su habitación, miró el frasco de las cápsulas que lo ponían a dormir para verse con su amada, sin pensarlo dos veces la tomó y dispuso abrir el frasco para ingerirlas todas que fueran necesarias para regresar con Helen; pero Lorenzo en su desesperación ingirió todas las cápsulas del frasco y se dispuso acostarse sobre su cama de nuevo, pero era tanta la sobredosis de la droga que su corazón colapsó, dejando un cuerpo inerte sobre la cama; alguien giró la manecilla de la puerta de la habitación dónde estaba el cuerpo de Lorenzo, era Helen en estado físico ya no era un sueño era una mujer real con un cuerpo propio, vio a su amado Lorenzo muerto sobre su cama y lloró amargamente por él, lo beso en su frente fría y sin vida, se dispuso a retirarse de la casa de Lorenzo, se miraba la silueta de Helen por la ventana de la habitación perdiéndose en ese hermoso paisaje.
A Lorenzo le salieron alas y desde el cielo vio una hermosa mujer llamada Cristal, que andaba perdida en una pradera llena de flores silvestres, Lorenzo bajó del cielo desnudo con sus bellas alas, Cristal lo vio descender del cielo como un príncipe de en sueños.....