El Espíritu Errante (Segunda Parte)

La moral de todo el regimiento estaba por los suelos, las malas noticias como siempre son un polvorín, que aunque te hagas oídos sordos siempre te enteras; el alto mando sabía muy bien por experiencia que no podía conducir a sus soldados con esa moral baja, sería absurdo conducir a sus soldados a una guerra de grandes proporciones, así que tomaron la decisión que el sargento Smith hablara con el regimiento antes de partir al objetivo, lo había elegido como el vocero oficial ya que el sargento Smith era un hombre muy elocuente, patriótico y muy educado; para esas clases de situaciones era perfecto tener un hombre como el sargento, así que a primeras horas de la mañana daría su discurso a todo el regimiento Unionista antes de partir.
 Ya era finales de Otoño el frío se cernía por todas las regiones, la mayoría de los soldados dormirían muy mal, para la gran mayoría era un mal presagio, pero para el joven Randy ya era otra cosa, él sentía que todo era surreal, todo lo que hacía era muy mecánico, como si arriba del cielo saliera unos hilos invisibles y lo movieran como a un títere, no sentía ni miedo y mucho menos coraje para ir a pelear, desde que vio a esos malditos Sureños arriba de esa colina ya su vida se torno gris e insípida, no le encontraba sentido a nada de lo que hacía ni a su misma vida; Randy estaba a recostado en un hermoso árbol de cedro mirando esa hermosa luna llena, al exhalar su propia aire salía humo de su boca, el frío invernal ya estaba a la vuelta de la esquina, Randy a pesar con sus veinte años cumplidos desde que era un adolescente siempre quiso tener una familia propia con esposa e hijos, pero cada vez miraba como se desvanecía ésos sueños de adolescentes; Randy está adentro de sus pensamiento y no vio venir a su amigo el sargento Smith, lo saludó con una palmada suave en su hombro derecho, Randy reaccionó un poco asustado - no te preocupes Randy soy yo, le dijo el sargento- venía fumando un cigarrillo y le ofreció uno a Randy, él lo tomó con mucha cordialidad - es una hermosa noche, no Randy? - Randy alzó su vista al firmamento y le respondió: eso parece sargento, lo dijo con una afirmación de sosiego- el sargento observó muy bien la expresión de Randy, y le dijo: todos estamos preocupados Randy, son momentos difíciles para todos, pero dime: que opinas de esta guerra? - pues creo que ya hemos hablado de esto antes sargento, le respondió Randy- éstas en lo cierto, pero los acontecimientos a meritan que volvamos a plantearnos la misma pregunta- Randy dio una calada profunda a su cigarrillo y viendo de nuevo el firmamento, le respondió: no se ni que pensar ahora sargento, lo único que le puedo decir que la mayoría de mis vecinos y amigos hoy están muertos, nos unimos a esta noble lucha cerca de 50 hombres de nuestro pueblo y hoy solo estamos cuatro, la mayoría de mis amigos de infancia han muerto, los recuerdo con mucho aprecio y por las noches cuando nadie me está mirando lloro por ellos, a veces me pregunto si todo esto valió la pena? - te entiendo perfectamente Randy, creo que todos hemos pasado por esos lutos que hoy empañan nuestras vidas, pero por el honor a ellos tenemos que seguir hasta el final, no te parece? - Randy dirigió su mirada al sargento, y le respondió: sabe algo sargento, lo más irónico de todo esto, es que la mayor parte del regimiento no sabe porque estamos peleando y lo peor que nos cuesta comunicarnos ya que todos somos inmigrantes y hablamos en diferentes lenguajes porque todos venimos de diferentes pueblos- ahora el sargento era el que alzó la mirada al firmamento nocturno, y le respondió: es mejor que durmamos un poco mañana será un día difícil para todos.
 El sol salía poco a poco en el firmamento, todo el regimiento estaba formado solo esperando la orden para partir, ahí estaba también Randy con sus cuatros vecinos de su pueblo, tal vez seria la ultima vez que los vería pensó Randy, era un día muy frió, aunque el sol era radiante, el frío se sentía hasta en los huesos, Randy sentía el frió desquiciante de su rifle, era como un maldito diablo sin tener piedad de nadie; el sargento Smith se apostó enfrente de todo los soldados ahí reunidos, con su rostro endurecido por la lucha y una mirada desafiante, les hablo de la siguiente manera: Creo que todos sabemos los pormenores de la que acontece en Pennsylvania, se han tomado la colina del Oeste que era nuestro objetivo desde que emprendimos este viaje, el enemigo ya está apostado ahí esperando el grueso de su ejército Confederado que está a un día y medio de nosotros, ya no importa saber como es que llegaron ellos allí primero, el objetivo es tomar esa colina antes que llego el resto del ejército Confederado; muchos estarán pensando o preguntando el por que de esta guerra? algunos piensan es para liberar a los negros Africanos que están esclavizados, eso solo es una parte de la verdad; recuerden que todos nosotros somos inmigrantes venidos de muchos pueblos lejanos, como: Escocia, Irlanda, Alemania, Rusia, Inglaterra, Italia, Francia,etc. pero recordemos porque venimos aquí a colonizar? hemos venido por nuestras Libertades Civiles!!! para ser hombres y mujeres Libres, porque en nuestro pueblos natales antes de nacer ya nos habían arrebatado lo que por derecho era nuestro, hoy nos encontramos aquí, para hacer de esta un nuevo pueblo Unido, una Nación Libre!!! donde todos seamos iguales ante la ley y no haya favoritismo de ninguna índole, no estamos luchando por tierras, pues eso vendrá después, luchamos por la Libertad y las Igualdades como hombres Libres, y hoy esas Libertades tan nobles están haciendo comprometidas y pisoteadas, es nuestro deber como personas Libres luchar por esta Nación y nuestras Libertades, Que mayor recompensa si luchamos todo juntos por defender lo que es nuestro por ley y que no nos vuelvan a arrebatar nuestras Libertades como lo hicieron en los pueblo que dejamos atrás; en estos momentos que estamos viviendo sin dudas haremos historia por esta Nación de la que cual estamos derramando nuestra propia sangre, yo no los puedo obligar a luchar a nadie ya que ustedes son personas Libres, el que quiere seguir en esta lucha noble que nuestro presidente Abraham Lincoln que nos apoya y nos exige, tomen sus armas y emprendamos marcha que son momentos de Gloria.....