El Jardín Del Edén Y Su Monólogo.

  El Jardín de muchos senderos, que algunas veces se bifurca en una enorme adivinanza, producto de las decisiones, circunstancias o ambas. La trama de todas las vidas es el tiempo, que los vives, se aproxima, se corta o temerosamente se ignora.
 En el Jardín de los muchos senderos y bifurcaciones, hay imágenes y sentimientos incompletos; es el modo tortuoso que algunos prefieren en su infatigable novela. 
 Confrontaciones, evasivas, correcciones, errores, incredulidad, engaños, incompresibles, razonables, estupideces, sensatez, etc. La explicación es obvia, así como obvia son las omisiones, de un recuerdo, en sellar los labios por una palabra o frase, de un imagen, de un bello poema... a veces recurren a metáforas ineptas y perífrasis a tanta evidencia y verdad. 
 El tiempo es infinito mientra haya vida, en cualquiera de sus expresiones, abarca todas las posibilidades; en una red creciente y vertiginosa de tiempos divergentes, convergentes y paralelos; que no existimos en la mayoría de esos tiempos; en algunos existe tu y no yo; en otros yo y no tu; en otros los dos y los que no conocemos, ninguno de los dos, pero no creas que no existen esos mundos; pero en este tiempo de favorable azar, tu has llegado a mis letras, a mi vida, y yo te digo que yo soy un fantasma, para que atravieses de nuevo el Jardín de los muchos senderos.....