Julio Penas (Capitulo Final # 9)

   Hola Carlota, soy del servicio al cliente donde tú has comprado la membresía de nuestra prestigiosa compañía, quería que tomarás un poco de tú valioso tiempo para ayudarte con tú perfil, y así poder tener una experiencia única en tú vida Cibernética, Que dices? - typing..... typing..... typing.......🕰... Creo que no pedí ninguna ayuda de parte de ustedes, respondió Carlota; era un maldito golpe bajo, Julio no se lo esperaba, por un momento quería desistir de tal propósito, ya que la vergüenza de que lo habían mandado al diablo era más que la necesidad del salario de hambre que le estaban pagando; pero después de unos minutos recapacitó, se dijo para sí mismo: primero, no me conoce quien soy, ni yo a ella; segundo: podría ser que tuviera un mal día, de esos días que te arrepientes haberte levantado por la mañana, o total desconfianza por un extraño, que es bastante comprensible en estos caóticos tiempos; tercero: es un jodido cliente!! Aunque me paguen un salario de hambre, tengo que tener ética profesional, así es que le insistire nuevamente; typing... typing... es un servicio gratuito Carlota, sólo quiero ayudarte con tú perfil para que tengas un agradable sitio donde puedas hacer tú sueño realidad; vaya! Julio no se explicaba donde le había salido tanta elocuencia, sería por sus estudios académicos? o era hederitario? Pensó en la respuesta de la primera pregunta. Typing... typing... Esta bien - Julio había hecho las respuestas acertadas: gratis y hacer sus sueños realidad, quien podría resistir a tal ofrecimiento?

  Dos meses después..... Julio se había entregado por completo a su primer trabajo que lo había desempeñado muy bien; su jefe de agradecimiento le había dado un aumento salarial, no era mucho como era de esperar, pero era un pequeño incentivo para seguir con su buen trabajo. Pero Julio no podía acoplarse a la vida social, tan sólo en la vida laboral del ciberespacio, eran tantos sus miedos que lo hacían cada vez huraño, reserva y menos elocuente; hasta que un día que conoció a Jessenia, que era un cliente a quien Julio le ayudó con su perfil; era todo lo contrario de Julio, una chica jovial, excepcional, servicial, elocuente y lo mejor, no tenía miedo en expresarse sus emociones y lo que pensaba de la vida; una gran ayuda para la vida de Julio Penas.