El Ángel de la Muerte (Décima Parte)

   

  Era evidente que tanto el ángel como el arcángel no confiaba uno del otro - A que vienes a mi? preguntó El Ángel de la Muerte - vengo a darte un mandato de nuestro Dios todopoderoso, le respondía el arcángel Miguel - Así!! cual es el mandato? preguntaba de nuevo Nicolás con menosprecio - nuestro Dios justo y todopoderoso quieres que vayas a la vida terrenal a mostrar tu gran poder y lo que sabes hacer mejor, asesinar a personas en cuerpo y alma, ahora era el arcángel que lo decía con menosprecio - Y ha quien se supone que debo asesinar? preguntaba El Ángel de la Muerte sin bajar su enorme espada de la presencia del arcángel - tienes que ir en el tiempo de Moisés y asesinar a todos los primogénitos Egipcios, ordenaba el arcángel Miguel - A Nicolás se le tornaba negros toda las pupilas de sus ojos, no podía creer que era lo que le estaba ordenando ese arcángel, pero algo era seguro, no se iba a dejar amedrentar por un puñado de ángeles celestiales -  Por que no vas tu y tus amigos hacer el trabajo sucio? preguntaba Nicolás enfurecido - El Arcángel Miguel también se enfureció alzando su espada de fuego amenazante contra Nicolás pero sin hacerle daño, le respondió a gritos: Insolente angel !!! como te atreves en hablar así de nosotros los seres preferidos de Dios que tenemos el derecho y el honor de estar en presencia de Él; A caso no sabes que somos seres sin manchas y asi nos tenemos que mantener para estar siempre en la presencia de nuestro Dios todopoderoso - y quieres que te crea todo esos cuentos que tu estas hablando? preguntaba Nicolás con todo la intención de tener una confrontación con esos ángeles celestiales y sobre todo con ese arcángel tan arrogante que solo necesitaba un motivo para emprender una lucha a muerte - El Arcángel se contuvo en tener un altercado con El Angel de la Muerte, pues sabía que era eso lo que él quería; Si lo crees o no, no es de mi incunvencia, pero algo sí es seguro, si no haces lo que Dios te ordena tenemos el derecho y el deber de encerrarte en el infierno junto con satanás y sus secuaces, como un dia lo hice con ellos por su atrevimiento, le decía el arcángel Miguel - Nicolás enfurecido le respondió: son órdenes y decisiones tuyas, ya que a Dios no lo conozco ni mucho menos a satanás como tu lo llamas, dile a Dios que no recibo órdenes de terceros, que si quieres darme órdenes que lo haga Él directamente, es más, si quiere asesinar a niños o niñas, que lo haga Él mismo -  El Arcángel Miguel ya no se pudo contener mas su furia contra el Ángel de la Muerte, así es que le gritó alzando su espada de fuego: Ángel Soberbio, pagaras tu atrevimiento!!!! de inmediato se formaron nubes grises con muchos

relámpagos dentro de ellas, el ambiente se puso pesado y oscuro; el Arcángel Miguel fue el primero en lanzar el ataque con su espada de fuego, pero el Ángel de la Muerte fue rápido en reaccionar, esquivando así la estocada lanzada por el Arcángel, pero cuando quiso reaccionar para el siguiente ataque ya el Ángel de la Muerte lo había sujetado con una de sus manos en la muñeca del Arcángel donde tenía sujeta la espada, torciendo con fuerza y le dio un fuerte golpe en la muñeca con la empuñadura de su espada haciendo soltar la espada de fuego, el Arcángel por su parte golpeó con su codo el rostro del Ángel de la Muerte, lo que le dio tiempo para sacar una de sus lanzas, los otros Ángeles celestiales que había llegado con el Arcángel se dispusieron atacar también al Ángel de la Muerte... fue así que empezó una gran batalla celestial, una batalla semejante a la de la raza humana, donde las diferencias y la imposición del poder sólo pueden ser solucionadas en base a luchas de muerte y sangre, donde la sensatez y la tolerancia sólo son para los pocos seres racionales, que aunque no tengan nada de celestial pero son un claro ejemplo de Paz, tanto como en el mismo cielo como en la tierra también. La lucha duro con mucho tiempo prolongado con relámpagos y centellas hacia el compás de esa guerra sin sentido, el Ángel de la Muerte en esa faena de lucha se había transfigurado en un ángel celestial también, pero nunca dudo en sus principios y el motivo de su lucha; El Ángel de la Muerte había vencido todos los ángeles celestiales incluido el Arcángel Miguel fueron desterrados del portal del tiempo.