Rocker's Life (Capítulo 5)

   Su tía Patricia fue a dejar a su sobrina Noemí al lugar de la fiesta, era una casa de un amigo de Penélope siempre del círculo Rockeros o Metaleros como comúnmente se hacían llamar; la familia de ese amigo habían tomado algunos días de vacaciones fuera de Lima, así que aprovechando la situación habían organizado una fiesta sólo para Metaleros; su tía al ver a lo lejos el lugar sintió mucho nerviosismo al dejar desamparada a su sobrina Noemí, más aún cuando vió las ventanas abiertas de la vivienda que salía una buena cantidad de humo y de fondo una música estridente, su tía se había arrepentido en haber dado permiso a su sobrina - Y que dices si te acompaño a la fiesta? Te prometo que te daré tu espacio para que te diviertas, decía su tía con nerviosa - Noemí se le quedaba mirando con pena a su tía, así como una comadrona? Seré el hazme reír de la fiesta tía, usted no sabe como son los jóvenes de hoy, le decía Noemí - Esta bien sobrina, solamente era una idea, pero prometerme que si están usando drogas te largas inmediatamente, le exigía su tía - Prometido! Respondía Noemí alzando su mano derecha en señal que había adquirido un compromiso.

 Le faltaban pocos metros para llegar a la vivienda donde era la fiesta, uno de los de allí presentes gritó: una Barbi Pink!! Cállate idiota! Es mi amiga! le respondió Penélope que al oír esas palabras se asomó hacía la entrada de la vivienda, mirando a lo lejos a su amiga Noemí; perdón Penélope sólo era una broma, decía el que había dado el grito de alerta. Penélope salió al encuentro de su amiga, pero Noemí no la había reconocido desde lejos, ya que se había transformado más psicodelica de lo normal, hasta que vió su bella sonrisa detrás de toda ese maquillaje oscuro y tenebroso, perdió el miedo, dibujando una bella sonrisa de amistad también; ambas amigas se abrazaron dándose un beso caluroso en sus mejías - me alegro de que hayas venido y que tú tía te haya dado permiso, le decía Penélope - Así es, pero estoy muy nerviosa es mí primer fiesta en Lima, aquí todo es tan distinto, le respondió Noemí - No te preocupes Noemí, has elegido bien tus amistades, porque a pesar que nosotros tenemos un aspecto terrorífico y poco agradable para aquellos que no nos comprenden, somos personas buenas y no nos gusta meternos en problemas.. al menos que alguien se quieran propasar u ofender, reflexionaba Penélope, pero vamos Noemí, que el tiempo apremia. Entraron a la vivienda, de un momento a otro aquél sonido de las guitarras eléctricas y la batería que se perdía en la oscuridad de la noche como una melodía suave haciendo contraste en la penumbra mezclada con los grillos cantores, era excesivamente fuerte para aquellos oídos que por vez primera escuchaba un ritmo que hace subir la adrenalina y transportar aquéllas almas inquietas que exigen cada vez más, pero para Noemí todo era confusión de ritmos, como si alguien tocara melodía muy poco atinada; las voces y los gritos de los cantantes de esas bandas rockeras hacían que le pudieran los pelos de punta a Noemí, se quería tapar sus oídos con sus manos pero desistió de hacerlo ya que temía poder ofender a los presentes; las vestimentas de todos ellos eran extremadamente psicodelicas, para otros pensantes "Exóticas" Noemí pensaba que quizás fue una mala idea ir a esa fiesta, pero trataría ser lo más sociable posible, aunque al decir verdad, los allí presentes no tenían aspectos de ser sociables; Penélope les presentaba a su nueva amiga Noemí a sus amigos metaleros, se estrechaban las manos como hacen los hombres, poco habitual para Noemí, pero todos tenían una sola frase como hermandad "Los amigos de nuestros amigos, también son nuestros amigos" sellando un respeto mutuo y una protección de hermandad que Noemí no tenía ni idea. La noche se hizo largo entre música estridente, chocando envases de cervezas, cigarrillos y abrazos alocados cantando a todo pulmón las mejores canciones de Rock que un día para ellos serían leyendas o clásicos de sus mejores tiempos.

 Ambas amigas se sentaron juntas en una cómoda esquina, Penélope bebiendo licor, gritando sus canciones preferidas y en algunos momentos saltaba de su asiento para gritar y alzar sus manos llena de felicidad por estar con sus amigos metaleros - Que te parece la fiesta amiga? Preguntaba Penélope - No se, no me puedo acostumbrar a esta clase de música y nose en que idioma cantan, decía con vergüenza Noemí - eso es lo de menos Noemí, son canciones en inglés pero aquí nadie sabe inglés, decía Penélope riéndose a carcajadas; es cuestión de costumbre, le decía Penélope, pero Noemí escuchaba todas las canciones iguales, no diferenciaba la una de la otra, todo para ella era una jerga alocada - Quieres una cerveza? Le preguntó Penélope, pero Noemí nunca había bebido en su vida, los principios que sus padres le inculcaron desde pequeña la hacia renuente a cualquier ofrecimiento, No gracias! Respondió Noemí - No te preocupes Noemí, aquí nadie se propasara con tigo, no somos de esa clase de persona, es más aquí todo te cuidarán como si fueras su hermana, al menos que te guste un chico de aquí, pero esa será tu decisión - no es por eso, decía Noemí con vergüenza - Ah... Eres Cristina? Preguntaba Penélope con una risita pícara - Noemí miraba a su amiga con desafío, sólo tomaré una cerveza, respondió Noemí - Listo! Gritó Penélope saltando de su asiento, se fue directo al refrigerador..