About Me: I was born in the most beautiful place in the Universe "Planet Earth" I love Literature in

My photo
Novato de la literatura y de la vida...

May 18, 2017

El Purgatorio (Capítulo 4)

  Emilio seguía su camino hacia el pueblo que había divisado a lo lejos antes de encontrarse con ese ser mitológico; había dejado atrás esa gran lucha a muerte entre el espíritu guerrero y el Minotauro, después de darse cuenta de la triste realidad de todas aquellas almas suspendidas por sus propias mentes humanas; después de analizar todo lo dicho por el hombre carnero, estaba claro que tanto la vida terrenal y espiritual puedes ser presa de las muchas realidades de la forma en que tú la enfoques o sean inducida, ósea influir a una o varias personas para que realicen una acción o piensen del modo que se desea. Pero de algo estaba muy seguro Emilio, en esa dimensión tan extraña hasta tus propios demonios se hacían realidad, era cierto lo que le había dicho el hombre carnero: Si fueras una mala persona ya te hubiera hecho daño.
  Emilio ya estaba bastante cerca de ese pueblo que a toda luces era bastante remoto, no le gustaba lo que miraba allí; al fin entró por la calle principal del pueblo o villa como se le conoce en las áreas rurales; Emilio caminaba con cautela y mucha precaución, no le gustaba que todo estaba desolado, algunas de sus calles estaban sin reparar, polvorientas y sin dudas lodosas cuando era tiempo de lluvias; al caminar por esas calles desoladas y ver las viviendas en la misma situación, se daba cuenta con mucho desánimo mientras transcurría el tiempo que era un pueblo fantasma; Emilio tenía la esperanza de encontrar habitantes en ese lugar para que algún lugareño le dijera exactamente dónde se encontraba, tal vez con la esperanza que alguien le mostrara el camino de regreso a casa; pero ahora todo era desánimo sin saber que hacer con su vida; escuchó lo que era para él un vehículo motorizado, de inmediato surgió la esperanza, corrió lo más que pudo dónde provenía ese sonido, cruzó una de las esquinas y divisó a lo lejos un autobús escolar, venía en su dirección, alzando sus dos manos, le hacia señas de alto a quien fuera que lo estuviera conduciendo, se puso en medio de la calle y gritaba con desesperación, como dando entender que era una situación de vida o muerte; a unos pocos metros el autobús escolar frenaba lentamente enfrente de Emilio, él sin pensarlo dos veces cuando el vehículo por fin dió el alto fue a la puerta principal para hablar con el conductor, las puertas del autobús se abrieron enfrente de Emilio, para él era las puertas del cielo, una luz de esperanza brillaban en los ojos de Emilio, miró al conductor con una sonrisa sincera en sus labios, un hombre de unos cincuenta años, cabello canoso y par de anteojos para ver mejor - ¿Anda perdido buen hombre? Preguntó el conductor - Sí, no se donde me encuentro, respondió Emilio - Suba, lo llevaré a un lugar seguro, le decía el conductor - Emilio subió al autobús y se percató que llevaba pasajeros, eran niños disfrazados de Halloween; el conductor se fijaba en la cara de admiración que tenía Emilio, él le dijo: son niños que van para la escuela, hoy las profesoras le celebrarán el día de Halloween, pero tomé asiento voy tarde, ya pronto será la hora en que comience las clases; Emilio se sentó en los asientos de enfrente del conductor, le dijo: gracias, mi nombre es Emilio, soy policía - el conductor lo miró y puso en marcha el
autobús, vaya pero su pongo que es su día libre oficial, jamás lo había visto por aquí - de eso hablo, estoy extraviado, nose donde me encuentro, tal vez  usted me podría decir - a mí edad Emilio ni recuerdo que ropa me puse ayer, lo decía riéndose, pero me gusta aquí es muy tranquilo y lo mejor hago el trabajo que más me gusta, no todos tenemos el trabajo que nos gusta, ¿o no? - tiene mucha razón, yo también tengo el trabajo que más me gusta, ser un oficial de la policía, lo decía Emilio con mucho orgullo - eso es una buena razón por el que vivir, en lo personal me encanta los niños, son traviesos pero son únicos en su inocencia, siempre quise tener hijos pero la vida, o mejor dicho, las mujeres me lo negaron, lo decía riéndose a boca llena - Emilio también se reía con él, era reconfortante encontrarse con una persona tan agradable; miraba hacia atrás del autobús y observaba que los niños estaban inmutables; ¿que les pasa a los niños, los veo muy callados? Preguntó Emilio - El conductor miró por el espejo que daba su reflejo al fondo del autobús; no se preocupe señor oficial, están guardando energía para fiesta de Halloween, no siempre son así - ya veo, ¿cuanto años tiene de chófer escolar? Preguntó Emilio - treinta años, decía el conductor con orgullo - vaya, a eso le llamo amar su trabajo - así es señor oficial, como verá no tuve necesidad de traer hijos al mundo, tengo muchos, cuando crecen se van, pero siempre tengo muchos más que viene, es mejor que ser un padre de familia porque cuando crecen los hijos se van de la casa y te quedas sólo, pero yo no, jamás me he quedado sólo, siempre tengo niños y nunca me siento sólo; lo decía siempre con una bella sonrisa en sus labios - ahora comprendo porque le gusta tanto su trabajo, decía Emilio - lo amo, sin mi trabajo de chofer escolar no soy nada. En una de las esquinas se detuvo el autobús escolar - puede bajarse aquí, al final de esta calle hay personas que lo pueden ayudar buen hombre, decía el conductor - gracias, estoy muy agradecido por su hospitalidad, decía Emilio bajándose del autobús; a propósito, ¿cuál es su nombre? Preguntó Emilio - Chris, decía el conductor con su sonrisa sincera - buena suerte Chris, le decía Emilio desde afuera del autobús y gracias; Chris cerró las puertas del autobús y se puso en marcha de nuevo, Emilio se olvidó despedirse de los niños, así que lo hizo desde afuera, alzando su mano con un adiós mientras el autobús escolar iba en marcha, pero su sorpresa fue que desde la ventana del autobús no miró ningún niño, el autobús iba sin pasajeros; Emilio se le congeló la sangre al imaginarse en lo que pasaba allí, miró el autobús escolar alejándose sólo con su conductor, después desaparecido ante sus ojos.


No comments:

Post a Comment

Note: Only a member of this blog may post a comment.