El Gran Engaño (1°- Parte).

 Estaba durmiendo, cerca de la medianoche escuché que golpeaban suavemente los vidrios de mi habitación, que siempre era alcanzable, vivía en un apartamento modesto en la primer piso, el golpe lo escuchaba muy lejos por mi profundo sueño, pero el golpe era constante hasta que al fin pude despertar de ese letargo sueño; cuando abrí la ventana de mi habitación pude ver que era mi amigo de la infancia Carlos, me sorprendí al verlo, pero no por la hora y la manera que me llegó a buscar, sino que muchos del barrio donde crecimos lo daban por muerto; lo primero que me dijo fue Shhh.... tapándose la mitad de los labios con su dedo inicial, después me dijo muy suave pero alarmado viendo a todos lados en la oscuridad, por si alguien lo estuviera siguiendo, me dijo: Marcos quiere hablar contigo, está muy cerca de aquí, te llevaré con él ahora mismo, así que hay que apresurarse... me vestí rápidamente, aunque yo sabía que estaba arriesgando mi vida, pero ambos eran mis amigos de la infancia y darles la espalda a ellos en esos momentos, era como traicionarlos o mejor dicho, como traicionar a mis propios hermanos de sangre, así de fuerte eran los lazos de amistad que nos unía.
 Llegamos a una área poco poblada que aparentaba mucha calma y confianza, mi amigo Carlos me guió a una de las casas muy apartada de las otras, cuando entramos en ella, se notaba muy modesta pero confortable, Carlos me hizo señas que entrara al sótano de la vivienda, del cual era un laberinto subterráneo interminable sólo Carlos conocía muy bien el camino, cuando estábamos cerca de nuestros destino vi unos centinelas en cada curva muy bien resguardados con sus fusiles automáticos y muchas carabinas, cuando me acerque a cada uno de ellos, me quedé horrorizado eran también mis amigos de la infancia, es muy difícil para mí describir esa sensación, verlos metido en una guerra civil a todos ellos, después que has convivido toda la niñez y parte de la adolescencia, conoces todos sus defectos, sus sueños, anhelos, virtudes, su inocencia, todo acerca de ellos y hoy verlos así de revolucionarios, es sin dudas una verdadera locura; ése día que los vi me puse tan alegre que hasta lloraba de tanta euforia, nos abrazábamos de tanta felicidad, no parábamos de sonreír y llorar de nuestra alegría, ya que pensaba que a todos ellos, quizás estaría muertos o desaparecidos. Pero Carlos nos retiró de ese momento tan emotivo y nos dijo que en otro momento tendrías más tiempo para hablar, y me tomó del hombro para seguir nuestro recorrido.
 Mi sorpresa al llegar a nuestro destino subterráneo era como un semi-hospital muy bien custodiado con sala de cirugia, Carlos me llevó a lo que creo que era una sala de recuperación, ahí estaba Marcos con muchas vendas, una de sus piernas estaba amputada hasta la mitad, tenía muchas esquirlas en su rostro y un ojo lo tenia vendado también, lo había perdido, pensaba que todo eso era una maldita pesadilla, él me miró y me hizo una media sonrisa, me acerqué para saludarlo pero era imprudente hacerle la típica pregunta: Cómo estás amigo? Sentí mucha pena por él y su familia, Marcos me dijo: mira como me han dejado esos malditos servidores de la oligarquía, son unos serviles que matan hasta su propio pueblo por salvaguardar los intereses de ése pequeño circulo que nos han tenido en esclavitud por décadas; yo entendía muy bien sus palabras y su tono de desprecio, ya que ése país se formó de dictaduras militares, tan sólo ése pueblo había gozado de una verdadera libertad cuando se independizó de la corona Española que duró apenas unos 12 años, después vinieron todos esos falsos gobiernos, que prácticamente había esclavizado a su propio pueblo sin ninguna misericordia, no existía Democracia, en pocas palabras los derechos fundamentales de los desposeídos, que era la gran mayoría, prácticamente no existía, en cada gobierno dictador, ya que llegó en un récord de tres gobiernos dictatoriales en menos de un año, el pueblo no tenia derecho de exigir y mucho menos protestar de nada: educación, salud, seguridad, empleo, aumento salariales, etc. porque prácticamente eras hombre muerto; cuando esos gobiernos de militares les exigía garantías constitucionales por medio de organizaciones internacionales como la ONU hacían votaciones populares, pero todas eran un verdadero fraude, es como si les escupieran en la cara a su propio pueblo. La gota que rebalsó el vaso fue que los que sufrían la extrema pobreza en ese entonces comían entre basura, comían los desperdicios de otros, fue en la ciudad Capital donde empezó todo ese movimiento revolucionario a gran escala, los que tenían mayor posición social se indignó al máximo al ver a sus propios hermanos viviendo y comiendo en estado deplorable, las protestas callejeras no se hicieron esperar, pero lo que hicieron los militares fue mucho más salvaje, cerraban las calles de extremo a extremo y disparaban a discreción, la sangre corrían por todos lados, después cerraban las calles y llegaban cisternas con agua para lavar todas las calles, no era permitido ningún periodista, la sangre del pueblo corría hacia las cloacas mezclándose con los mismos desperdicios.... Marcos continuo: Necesito un gran favor de tu parte amigo - si te lo puedo cumplir con gusto lo haré, le dije - me miró pensativo y me respondió: sé que lo harás, necesito que le des un dinero a mi madre de todos mis ahorros, ella lo necesita más que yo ahora, los ahorre desde que empecé a trabajar desde 12 años, a mi me sacaran del país exiliado a otro país, no me puedo quedar aquí ya no puedo combatir y si me atrapan, bueno ya tu sabes los que nos hacen si nos atrapan, nos torturan para sacarnos informacion, nos matan y después pasan tirando nuestros cuerpos por las calles como si fuéramos animales; en ese momento la visión se me nublo, me dio un ligero mareo, Carlos me sentó unos tablones que improvisaban las sillas, - Marcos me dijo: que te paso? no quieres ayudar a tu amigo?- me le quedé mirando pensativo y le dije: sabes lo que me estas pidiendo? Sabes algo, tu madre se sienta afuera de su casa antes que sol se oculta todos los días, mirando el horizonte, se le salen las lagrimas y yo al ver eso me acerco a ella, y le preguntó si se encuentra bien, ella me dice que no, que todos los días tiene las esperanza que tu regresaras sano y salvo, yo cómo puedo le doy ánimos, y hoy que te he visto, que se de tu estado y donde estas, tu madre me hará un sinfín de pregunta de tu paradero y tu salud - Marcos me dijo: no puedes decir a nadie dónde estamos- Maldita guerra!!, le dije, se que no los puedo delatar porque si lo hago irán ustedes por mi - Marcos me respondió: que poco nos conoces, tú sabes que a ti no te haríamos ningún daño, primero preferimos morir antes de traicionar a un amigo y tu bien los sabes, es nuestro juramento- me quedé aturdido, le dije: no se Marcos, no se si tendré la conciencia tranquila después de esto, de saber de ti y no decirle nada a tu madre, ella que se muere de angustia y desesperación por saber algo de ti, me quede sentado con mis dos manos en mi rostros callado e indeciso, los tres estábamos callados, Marcos después de unos minutos habló: lo siento mi amigo, pero solo en ti puedo confiar la suma de dinero es mucha, y a nosotros todos nos busca las autoridades, solo tu no tienes persecución, lo siento, - Maldita Guerra!!! le dije- después dije con rabia unas palabras que sin saber eran proféticas, pero ni yo ni nadie lo sabíamos en esos instantes, les dije: Saben algo, toda esta guerra me huele a una verdadera y asquerosa farsa, por todo lo que se esta luchando me parece demasiado bueno para que sea verdad....