Una Vida Fuera de Casa

 

 Alonzo era un hombre maduro de 55 años, divorciado y con dos hijos ya mayores viviendo en el extranjero ambos ya hace muchos años. Aunque amaba su país con toda el alma, sus líderes políticos se comportaban en una forma discriminatoria, descarada y vil, con la gran mayoría de los ciudadanos de escasos recursos, Alonzo desde que cumplió 35 años le costaba cada vez más encontrar un trabajo estable, y no solo a él, también a los miles de mujeres y hombres que llegaban a esa edad, porque la discriminación están profunda y arraigada que cualquier persona que llega a la edad de 35 años se considera una persona vieja y con bajo rendimiento para todos los empresarios nacionales y hasta extranjeros, por no crear leyes antidiscriminatorias y hacerlas cumplir para proteger a miles de trabajadores tanto adultos como a jóvenes, porque tarde o temprano todos llegarán a ésa edad, que para mi todavía se es joven.
Alonzo ya muy preocupado por el desempleo y más aún porque cada año se acercaba para su jubilación, sin poder cumplir las metas proyectadas para tal fin, decidió tomar las palabras a sus dos hijos que vivían en el extranjero, se iba  aventurar a tener otra clase de vida fuera de su país amado.
En dos meses Alonzo ya estaba con sus dos hijos en un país bastante extraño para él, pero se sentía bastante bien pues para Alonzo todo era nuevo y más aún conviviendo con sus dos hijos al fin. El tiempo paso y como era de esperar Alonzo tenía que tener una vida más independiente de sus hijos, ya que ellos tenían su propio hogar que tenían que dedicarle mucho tiempo, eso lo comprendía bastante bien Alonzo, fue así que empezó a tener una monotonía en ése país extranjero para él, de su casa al trabajo y del trabajo para su casa, los fines de semana siempre compartía con sus dos hijos y nueras, pero el tiempo y la distancia empezó hacer meollo en Alonzo, se sentía cada vez nostálgico, recordando sus amigos de siempre, sus vecinos, su clima, su barrio, sus familiares lejanos, sus comidas típicas y sus costumbres; para las personas más jóvenes e infantes es mucho más rápido la adaptación en los países extranjeros, pero para las personas mayores es mucho más difícil porque prácticamente han dejado casi toda una vida en sus países de origen, sufren mucho de depresiones y ansiedad, algunos lo logran superarlo pero otros no, ése era el caso de Alonzo su adaptación fue perturbador, hasta que encontró a su otra parte se llamaba Helen de 54 años, se conocieron en el mismo lugar de trabajo, desde el primer momento fue atraída enormemente con el comportamiento de Alonzo ya que él era a pesar de su edad un hombre muy jovial, divertido e interesante, sobre todo muy educado, Alonzo también le atraía el comportamiento de Helen y había notado su interés de querer ser más que simples compañeros de trabajo, así es que un día la invitó a cenar, Helen sin pensarlo dos veces aceptó.
 Llegó el día de esa velada romántica, Helen a pesar de su edad se miraba radiante esa noche, se notaba todavía esas facciones de belleza que un día lo fue en sus mejores años mozos, Helen le confesó Alonzo que ella era casada y como un trágico accidente había llevado a su esposo estar en coma, ya había cumplido un año de que su esposo estaba en ése estado de salud tan lamentable y como ella había perdido toda esperanza de que su esposo despertara de ese letargo sueño impuesto inconscientemente. Pero eso no afectó esa velada hermosa, Helen solo quería ponerlo al corriente de su actual vida, fue así que nació una bella relación de dos personas maduras, que ya no andaban con chiquilladas para amarse profundamente.
Pasaron los meses, Alonzo y Helen siempre mantenían una bonita relación, esas relaciones de personas maduras que se aman con tanta seguridad y son realistas, que solo los años de experiencias te los da. Siempre frecuentaban su Hotel preferido, ahí se amaban en su amor Otoñal que nada tenía que envidiar al amor primaveral....Y siempre tenían una velada romántica que ambos le gustaba, escuchando esas hermosas rancheras tan profundas y reales como la vida misma....