Recibe en mi frente un beso, pero no fue un beso cualquiera, eres la mensajera que inspira al amor y la esperanza; que lleva la alta esfera celeste, la flor que aroma emana. No se si eres lucero que anuncia un alegre día, o un ángel que anuncia la buena nueva, ¡Oh, mágico lucero! Anhelo conocer tú magia. Tengo en la palma de mi mano granos de arena dorada, ¡son pocos! ¡Oh, mi hada! ¡Oh, dulce flor de la mañana! tu magia si tu magia lacerante y a la vez reconfortante; ¡Oh, Dios! ¿Por que no puedo retener en mi mano los granos de arena dorado? ¡Oh, Dios! si yo pudiera salvar una de esas arenas doradas... hasta nuestro último empeño es sólo un sueño dentro de otro sueño...
Todo se apaga y extingue menos tus alas mi hada, tu mirada hace arder mi alma mi hada, y solo veo entre las sombras aquellos ojos brillantes, ¡Oh, mi hada! que misteriosas esperanza fijarme en tu mirada, mi hada.
A través del espacio y tiempo marca mi sendero y mis esperanzas; ella purifica mi alma con sus arenas doradas que mi corazón los abrazan con adoración extasiada.
Una vez sonrió las silenciosas torres, donde muchos habitaban, se habían ido las guerras a otros lugares, confiamos en las estrellas de suaves destellos y confiamos en Dios; cada noches en esas enormes damas, la blanca luz de luna descansaba perezosa, esperando salir la roja luz del Sol ansiosa. Ahora cada visitante que una vez estuvieron en esa torres confesara la triste historia; nada allá era inmóvil en ese dia de terror, nada salvo el aire que se detuvo ante el espanto, la destrucción y la locura. ¡Ah! ¿ningún viento movió aquellas nubes? que susurran a través del sin sosiego cielo; ¡inquietante desde la mañana hasta la noche! sobre la violencia allí yacen incontables tipos de miradas humanas, sobre los lirios se agitan sus almas y los mortales lloran sobre desconocidas tumbas... Ondean la esperanza con la misma sintonía de venganza, las eternas guerras derrama sangre gota a gota... despojando mas almas de cuerpos mortales...
¡Como nos estremecemos del miedo! con la melancolía amenazante de su tono, cada idea que flota en sus mente desquiciadas, traspasa sus oxidadas gargantas, es un gemido de almas agonizantes; son humanos - ¡Ah! ¿¡humanos!? ¡No! ¡Son Vampiros!
Nube gris! fluye! fluye! a la tierra de los de hoy desterrados... ya nada me une a esa tierra y ha esos cielos; deliran los locos en ese jardín del Edén; un gato negro da bostezos en medio de la noche, va llegando a las tierras de las flores marchitas, de los seres ignorados, de las gentes sin nombres, de las almas sin consuelos, de los individuos con un sólo rostro “La Desigualdad “ una maldita mutación discriminatoria por sus actos crueles que hoy contaminan a toda raza, hasta los suyos.
A que tierra pertenezco? Ya no lo recuerdo! todas los lugares me parecen ajenas.... las nubes grises se aproximan nuevamente, cargadas de tempestad, con vientos implacables, destellos horripilantes y despiadadas descargas... los ríos se desbordan y los mares se enloquecen; las almas se anidan con temor en esos cuerpos frágiles y vulnerables, que muy bien aprovechan las almas perversas incrustadas en esos cuerpos tan repugnantes.. dónde están esas almas que se horrorizan por tales vejámenes? Cobardes! se esconden antes los actos perversos de esas almas de animales! Eso da miedo, que las almas buenas se queden callada e inerte ante tales vejámenes. Naufragare sobre esa tierra, sobre las tumbas de aquellos nobles guerreros, esos valientes que no se doblegaron ante la tiranía, la usurpación y ocupación que se a vuelto eterna; si hemos de resucitar será para glorificar de nuevo los cuerpos humanos una vez mas, pero nuestro enemigos siempre serán los; crueles, despiadados, profanadores, perversos, ladrones, asesinos y todos aquellos que le hacen mal a sus semejantes, piedad para ninguno de ellos!
Desde mi infancia no he sido como otros eran, no he visto como otros veían, lleve todas mis pasiones en una nube roja, despertó mi corazón en un jubileo con el mismo tono, y todo lo que ame, lo ame solo; mi infancia fue el alba de mi vida tempestuosa, saco desde mi profundidad lo bueno y lo malo, el misterio que todavía me ata; desde las nubes rojas hasta las rojas montañas...... nubes grises descarguen su tempestad a los perversos, a los que no merecen un espíritu leal...
Nota: Dedicada a Nube Roja https://es.wikipedia.org/wiki/Nube_Roja
Un Hombre que piensa, el que tiene un ramo de olivo en su mano, él viene del cielo azul, del Sol, de los Océanos, de las estrellas, del Universo; cargado de palabras potentes y concretas, para hablar de toda una vida terrestre. Tal vez será desigual a sus semejantes, pero Pegaso dará saltos! como potro salvaje, como lo que es; tal vez sea tempestuoso, pero tiene una sangre que apenas veréis en otros cielos, como la luz penetra y como la onda ondula. Pegaso está contento! no es otro Belerofonte, odiado por los dioses, donde se atrevió ir al Monte Olimpo y donde encontró su propia desgracia.
Pegaso paseara en los prados del Incas, y aquel poeta de alma tan ardorosa sabe muy bien lo que cuenta, sabe leer los labios de las estrellas y comprende los secretos del duende del arco iris. Pero el hombre que piensa, su brazo no levantara la trompeta hacia donde se anuncia la aurora del profeta; fue hecho para darle la virtud al viento, la expresión terrible del pensamiento; el hombre que piensa sabe del majestuoso Chimborazo, de la Amazonas y los Andes. Siempre enarbola sus palabras para las cosas grandes; vive por el amor de América y la pasión de Don Quijote de España; envuelto en: armonía, melodía y canto. Así lo digo Yo! el último Inca que se convirtió al castellano montando a Pegaso....
Eres la novia que nunca fuiste fiel en el tiempo, juventud añorada, antiguas glorias... te convertiste en mi hada para filtrarse en mis sueños de Otoños. Fuiste la juventud en tiempos dichosos, complicados, llenos de incertidumbre pero sobretodo de luchas constantes y me enorgullecisteis cada vez que te levantaste cuando creías que todo estaba perdido, ¡fueron innumerables caídas! ¡Carajo! pero así forjaste tu propio carácter, juventud añorada.
Perdí tiempo de ese tesoro llamado juventud, por: arrogancia, falta de experiencia, ingenuidad, falta de coraje y por poner la confianza en personas que nunca se lo merecieron, que en todo caso, fueron una verdadera pérdida de tiempo. Pero las experiencias de esos años mozos, fueron hermosos recuerdos de: drama, romances, acción y hasta ciencia ficción, ¡Ja! Jurando amores con esas bellas flores, flotando sobre sus polen... ¡vuelve juventud! vuelve aquellos tiempos de bellos y fortuitos amores....
Hoy que me siento feliz, veo musas inspiradoras y enjuga sus lágrimas en mi corazón; canto por la memoria de mis recuerdos, de una música lejana que embargo mi espíritu varonil, inquieto como el niño que fui y nunca volveré a ser. Nunca quise hacerme mayor, ni envejecer, ni decaer mis ánimos reflejado en una sonrisa llena de incertidumbre, cautivadora de aquella vergüenza a flor de piel, que ha descubierto la plenitud del silencio, y el excelso cielo y el mar...
Pero mi espíritu se estremece al sentirse atrapado en este cuerpo envejecido, que en sus mejores tiempos le servio para andar como potro salvaje, explotar toda su energía y hasta darse el lujo de andar a la deriva; pero algún día no muy lejano será libre nuevamente, porque para el espíritu no hay tiempo ni cuerpo humano que lo detenga, porque sólo le basta desarrollarse de esas hermosas vivencias que un día, su cuerpo fue el vehículo para transcender....
