El Lado Sur del Cielo (Tercera Parte)

 El espíritu que un día fue Daniel estaba observando detenidamente a Nicolás adentro del cementerio, Daniel sentía una mezcla de sentimientos encontrados: temor, incertidumbre, frustración con una pizca de envidia; su visión era muy borrosa y distorsionada cada vez que el aura de su espíritu se apagaba y encendía de manera intermitente, Daniel se frustraba por ya no tener un cuerpo humano, quería hacer algo al respecto con Nicolás, él se estaba acercando demasiado donde tenía sus tesoros y dinero en efectivo.... Nicolás por su parte sintió miedo, pero recordaba los buenos consejos de su padre y era que nunca te sientas intimidado por un espíritu. Daniel tomó valor y se acercó a la tumba de Daniel para la limpieza, por lo que le habían pagado por adelantado sus familiares, cuando había caminado unos cinco metros sintió una fuerte sacudida en su mano donde llevaba su linterna, haciéndola rodar sobre el piso polvoriento del cementerio, Nicolás hizo un alto y ya no vio al espíritu, pero Nicolás le gritó: sé que estás aquí y dime tú nombre, sé que estás molesto por algo; el espíritu de Daniel volvió aparecer de nuevo en forma distorsionada al pie de su tumba - vete de aquí forastero, no eres bienvenido, le decía el espíritu de Daniel - No quiero molestar tú eterno descanso espíritu sin nombre, le decía Nicolás en forma astuta para que el espíritu le diera su nombre - A esto le llamas eterno descanso? lo dijo con su voz distorsionada en forma de ironía, y mi nombre un día fue Daniel, pero hoy no se en realidad quién soy ni sé adónde pertenezco - Nicolás era un joven muy inteligente y rápidamente se dio cuenta el tono de frustración que le hablaba ése espíritu; también recordaba las conversaciones que su padre mantenía con respecto a los espíritus, muchos de ellos están en un estado de inconsciencia, no están consciente de su estado espiritual del cual se aferran mucho más en la dimensión de las almas encarnadas - Tu solo quieres robar mi dinero y mis joyas, que tantos años de sacrificios me ha costado obtener, le decía el espíritu de Daniel muy molesto - Nicolás recordó en esos momentos que su padre le había contado que hay personas que dejan enterrados o a escondidas su dinero y joyas antes de morir, pero lo que no saben ellos que lo único que ocasionan es que su espíritu quede aferrado a esta dimensión por estar cuidando sus pertenencias y no les interesa su estado puro espiritual de lo cual poco a poco se desvanece su aura que es la psiquis o la fuerza vital del espíritu, ocasionando su muerte espiritual de lo cual solo será un vago recuerdo de lo que fue en vida. Nicolás sintió piedad por ese espíritu desolador y angustiado: solo quiero limpiar tu sepulcro ya que tu familiares así me lo pidieron, le respondió Nicolás - Mentiras!!! le gritaba el espíritu de Daniel en forma distorsionada y muy mal humor, solo quieres robar mi dinero!!! le repetía el espíritu una y otra vez - No necesito de tu dinero alma desdichada que no ves que esta muriendo  tu espíritu por ser esclavo de tu propio dinero, le decía Nicolás - Solo yo se lo que tuve que pasar para obtener mi propio dinero y posesiones, no pienso compartir con nadie y menos un perfecto desconocido, respondía Daniel - Nicolas sabia muy bien que el avaro no era capaz de conmover su espíritu para ayudar a personas que enverdad necesitara de ese dinero: tu egoísmo será tu segunda muerte Daniel, acaso no te das cuenta? Prefieres morir de nuevo por algo que jamás podrás disfrutar? - El espíritu de Daniel se enfureció tanto por su frustración al verse impotente y no poder hacer nada por impedir que Nicolás se fuera del lugar que se fue volando entre las tinieblas como un espanto a toda prisa; Nicolás al no sentir más su presencia llegó al sepulcro a limpiar la lápida de Daniel, en poco minutos Daniel llegó con dos espíritus más, al igual que el eran espíritus avaros, miraban a Nicolás enfurecido y demostrando terror para que a Nicolás sintiera miedo y se fuera de ahí, pero su egoísmo de los tres espíritus iba creciendo en aumento hasta el punto que se desvanecieron para siempre....

La Virtud y El Deseo

 

  La virtud es una disposición constante del alma para las acciones conforme a la ley moral.
 Las cuatro virtudes cardinales son:
- TEMPLANZA: esto se obtiene en base al carácter, que se moldea conforme a las experiencias vividas.
- PRUDENCIA: se obtiene en base a la madurez y la tolerancia de nuestro diario vivir.
- FORTALEZA: es la constante de tus propios principios morales y éticos.
- JUSTICIA: aquellas personas solidarias ante el dolor o pena ajena, no tan sólo con las personas con las que convive o familiares, sino con todas aquellas personas vulnerables. La justicia se obtiene en base a la misericordia y la compasión.
 Sócrates opinaba que la virtud es aquello que nos ayuda a conseguir el bien mediante el razonamiento y la filosofía. Platón opinaba que la virtud tiene tres poderosas herramientas: el Intelecto que es la madurez o sabiduría, la Voluntad y la Emoción que es el carácter.
 La virtud siempre estará motivado por el "Deseo", sin ella no podemos obtener ninguna clase de virtud, pero recordemos que hay dos parámetros del deseo: buenos deseos y malos deseos o deseos positivos y deseos negativos; lo que nos plantea Sócrates es el razón, por ejemplo puedes desear ser una persona racional o puedes desear ser una persona irracional; recordemos que hemos nacido como personas racionales, lo irracional siempre irá en contra de nuestra propia naturaleza humana, es aquí donde se deriva la frase " Seamos más Humanos". En estos términos es donde más frecuencia se da muchas malas interpretaciones, ya que el calificativo de "Humanos" algunos lo toman como perversos e injusto, por ejemplo: el ser humano es quien hace las guerras, el ser humano es quien contamina el mar, el ser humano es quien contamina nuestro aire, el ser humano es quien está destruyendo nuestro planeta, el ser humano a creado la pobreza, etc. Pero es importante aclarar que la propia naturaleza del ser humano no es esa, se trata de personas irracionales que se dejan seducir por sus bajas pasiones haciéndolas personas insensibles ante los demás, son personas fuera de control.
 El Deseo si está dirigido por el razonamiento humano o del alma siempre nos convertirá en personas virtuosas, porque la virtud es el bien supremo de nuestra propia existencia. Por consiguiente nuestra propia naturaleza humana nos lleva a la tendencia de ser personas virtuosas, pero algunos se pierden por el camino de la vida de nuestro diario vivir, las personas que lo consiguen su espíritu se asemejan poco a poco más a nuestro verdadero Dios.

El Lado Sur del Cielo (Segunda Parte)

 

 Los días pasaron con normalidad después de la muerte de Ramiro, su hijo Nicolás había heredado el oficio de Sepulturero que su padre había dejado vacante después de su muerte; aunque Nicolás no pensaba tomar ese oficio ya que como era normal entre los jóvenes de querer decidir su propio futuro y anhelos, pero su suerte había cambiado en un abrir y cerrar de ojos; con el último miembro de su familia muerto y a sus veinte y dos años de edad, Nicolás no tenía más opciones, estaba desamparado en un mundo que lo discriminaba y señalaba como un bicho raro constantemente, su única seguridad era el cementerio donde su padre lo había criado; era un lugar muy seguro ya que ninguna persona se atrevían a meterse al campo santo para hacer sus fechorías, el tabú era muy buen repelente para mantenerlos a raya del cementerio, aunque tarde o temprano allí iría a parar sin pena ni gloria, serían la nueva compañía de Nicolás tal y cual era natural para él. 
 Cuando Nicolás se sentía frustrado y sólo por su desdicha lloraba a su padre con amargura; una noche dentro de su precaria vivienda en el cementerio como era casi ya una costumbre para él, estaba llorando a su padre a luz de una vela, su única compañía, en ese momento entró una suave brisa muy helado en una de las ventas que tenía abierta que apagó su vela, Nicolás buscaba la caja de cerillos que había dejado a un lado de la mesa donde él estaba sentado, la encontró y sacó uno de los cerillos, lo encendió rápidamente pero al fondo de la única habitación vio una figura traslúcida que emitía su propia aura, Nicolás casi se fue de espalda cuando vio ese espíritu, pero Nicolás tomó valor y le preguntó: Quien eres? - Soy yo hijo, tú padre Ramiro, ya no me reconoces? Nicolás se tiró al piso de rodillas llorando como un niño - Padre me hacés mucha falta, Por que te fuiste de mi lado? - Mi ciclo de mi vida terrenal a terminado hijo mío, yo te hablé acerca de eso muchas veces, pero no temáis vendré por ti cuando tú ciclo de vida termine para estar junto contigo nuevamente y con tú mamá también, ya nada nos separará, pero no llores más por mí, porque me hacés regresar de mí camino emprendido donde se encuentra tú madre - Perdón padre no quería interrumpir tu santa paz, pero te prometo que desde hoy seré un hombre fuerte y siempre te recordaré con cariño, le decía Nicolás con resignación - Se fuerte hijo mío y ten fe de ti mismo, nos veremos cuando tu ciclo termine, le dijo su padre antes de desaparecer con la misma briza con la cual había llegado a visitar a su hijo querido.
  Ahora más que nunca Nicolás estaba resignado que estaba sólo en esta vida, que no contaba con nadie tan sólo a sí mismo; pero lo que no sabía Nicolás era que cuando el espíritu de su padre se le presentó y habló con él, su padre sin saberlo había abierto una comunicación entre esos mundos paralelos, un portal entre los mundos de los muertos con el mundo de los vivos, haciendo de su hijo el emisario de los espíritus no encarnados, un extraño don que Nicolás poseía sin saberlo por el momento y que le cambiaría su vida para siempre.
  Una tarde gris antes que el sol se ocultara por el horizonte, Nicolás recordó que unos familiares que tenían un difunto enterrado ahí en el cementerio, le había pagado en efectivo para que mantuviera limpia la tumba y lápida de su ser querido durante un mes que ellos estarían de viaje, así es que se dispuso ir por su linterna de mano, salió de su vivienda y emprendió el viaje dentro del cementerio donde estaba esa tumba en mención, sabía que dentro de pocos minutos se haría noche pero eso no le importaba a Nicolás, ya que se crió en ese lugar que para él era un lugar del eterno descanso y no le tenía miedo de los cientos de mitos que contaba las personas supersticiosas.
 Nicolás iba por el camino polvoriento del cementerio con linterna en mano, sentía en él algo muy extraño en el tiempo en que el caminaba miraba y sentía todo en cámara lenta, podía escuchar su respiración y el palpitar de su corazón, algo así como una caja hermética, miraba al horizonte se daba cuenta que el sol se había ocultado, encendió su linterna y cuando estaba a unos pocos metros en llegar a la tumba su linterna se apagaba y encendía sin que Nicolás la manipulara como un luz intermitente, Nicolás hizo un alto para golpear su linterna, sabia que tenia baterías nuevas, pero tal vez se habían movido dentro del artefacto así es que la golpeó sobre una de sus piernas repetidamente, en esos momentos sintió la presencia de alguien y puso su mirada en dirección de la tumba que tenía que limpiar y para sorpresa de él, vio un espíritu que su aura destellaba una luz tenue intermitente así como su linterna, en esa combinación de encendido y apagado miraba que ese espíritu se desfiguraba y luego volvía a su apariencia normal, una figura dantesca.....

La Convivencia Humana

Nacimos y nos criamos como personas sociables, nuestra complejidad de nuestra vida y mente así nos exige, aunque nacemos con conocimientos adquiridos tenemos mucho que aprender, es una aprendizaje continuo y sin interrupción hasta que el último de nuestra especie desaparezca físicamente; es tan compleja y paradójica nuestra vida, que el peor enemigo de un ser humano es otro ser humano. Tenemos que estar conciente que a pesar de nuestra propia complejidad la convivencia humana es fundamental y determinante para nuestra propia existencia como raza humana y lo mas importante, nuestra evolucion como personas tanto tecnologicamente  tambien como personas con una moral evolutiva en constante y cambiante. Algo muy importante en todo esto o como un ingrediente más, es que debemos ser conciente que todo nacemos para aprender en esos patrones evolutivos como personas con las mismas condiciones, nacemos para aprender como persona sociable e intelectual desarrollarnos como tal. Como bien es conocido hasta hoy en día que cada ser humano es diferente y en el aprendizaje sucede lo mismo, sea intelectual o racional, algunos les toma más tiempo  que a otros para asimilar y aprender, por eso hay tantos métodos de aprendizaje, ya que algunas personas le puede funcionar algún método específico y a otros no, pero no se trata de tontos e inteligentes, sino así es nuestra naturaleza, unos nacemos con ciertos dones específico para desarrollarnos como seres humanos, por ejemplo: poeta, músico, cantante, matemático, doctor, arquitecto, mecánico, artesano, agricultor, estilista, etc. La educación académica de calidad será determinante para tal propósito, nos enseña analizar y aprender cientos de temas mirándolo del punto de vista superficial sin necesidad de inmiscuirse o adentrándose, para razonar y sacar nuestras propias conclusiones de otra perspectiva, a diferencia de cualquier clase de adoctrinamiento.
 En lo social será determinante nuestras relaciones estrechas o no tan estrechas con las demás personas que nos rodean, Por ejemplo: vecinos, amigos, amigas, novio, novia, compañeros de trabajo, familia, etc. Algunas personas aprenden a vivir sus vidas sociables en base a consejos por experiencia de otras personas, la mayoría aprenden conforme a las experiencias vividas y otras personas nunca aprenderán a vivir su vida sociables por diferentes motivos y causas; muchos descubrirán el lado más sensible de su ser que es el comienzo donde se inclina la balanza a los sentimientos buenos o positivos; y para otros descubrirán su lado oscuro o perverso, que será su inclinación a los sentimientos malos o negativos.
  Es fundamental estar consciente que a lo largo de nuestra vida sociables conoceremos cientos de personas esto incluye los familiares, novia, esposa, esposo, amigos, vecinos, compañeros de trabajo, etc. algunas sólo estarán de paso en tú vida, otras llegarán a nuestra vidas para quedarse con nosotros para siempre que son las más importantes y relevante, ya que nos aceptarán, respetará y amará tal como somos. Los sinsabores que algunas personas te dejen con su convivencia en ningún momento será una oportunidad para que crezcamos como personas racionales, tan sólo te convertirá una persona menos ingenua, más alerta y desarrollar tú propio carácter, lo más lamentable según tus malas experiencias te puede llevar a la depresión y suicidio. El crecimiento personal se da cuando las personas con sentimientos malos o negativos se reedifica haciéndose consciente de sus malos actos y cambia de comportamiento; también aquellas personas con buenos sentimientos y se aleja o evita a todas aquellas personas tóxicas o con sentimientos negativos, convirtiéndose en una persona selectiva con las personas que desea convivir, su crecimiento personal crece como espuma. La madurez que antes se le llamaba sabiduría es el estado culminé del ser humano, que lo consigues con la razón y el sentido común; serás una persona sensata, justa, consciente y tolerable, que es la base de tus principios personales.
 Lo escrito anteriormente si te das cuenta está basado en nuestros propios sentimientos humanos, que es la verdadera esencia de nuestro ser y del cual nos diferenciamos de las otras criaturas, lo monetario o el poder adquisitivo, las posesiones materiales siempre estará en juego en nuestra conducta humana porque la pobreza y la miseria que nosotros mismos hemos creado es la peor peste de nuestra convivencia humana, ya que algunos toman ventajas sobre los otros por diferentes motivaciones y otros les siembra muchos mitos y cuentos como verdades absolutas aprovechándose de su ignorancia que es una de las mucha ramificaciones de la pobreza.
  La convivencia y nuestro comportamiento humano es la clave de nuestra propia trascendencia espiritual, es nuestro pasaporte que necesita nuestras almas para pasar al otro plano existencial, pero la magnitud de esta convivencia humana tiene un riesgo que debemos asumir con responsabilidad y de una forma consciente.

El Lado Sur del Cielo (Primera Parte)

 

                    

  Nicolás estaba enterrando a su última miembro de su pequeña familia en un día gris de otoño, que se resumía a su madre y padre, como una familia peculiar para toda la sociedad por vivir en un cementerio público, carecían de amigos o amigas y hasta su familiares más cercanos los rechazaron cuando se enteraron de tal inexplicable residencia; Nicolas le daba los últimos palazos de tierra a la tumba de su padre con lágrimas en sus ojos, tan solo de testigo un frío que calaba hasta los huesos y sus pensamientos que divagaban: Así pasa la vida, que raro espejismo, así es como se termina la lucha del bien y el mal, de lo razonable y lo irracional; ves el Sol apagar su luz, todas aquellas aventuras y renacer, desaparece el camino. Miro la Luna desgarrando su velo des las tinieblas y el brillar de aquellas luces astrales pintan un extraña ilusión en esta soledad, así levanto sobre el cielo astral, funeral de tristeza.

 ¡Oh, Dios! ¿Por que nos disteis está vida tan llena de miseria y tristeza? Ahora conozco la soledad de esta tierra y el olvido del cielo; y nuestros anhelos sólo es un fantasma que se refleja en la mente para después estremecer el espíritu. Cuando mi padre decidió residir entre los muertos, yo fui su único súbdito que le daba su locura, me hizo el honor de llevar  la marca negra en mi frente del rechazo social; me abandonó antes que me lavara mi rostro ante su presencia, pero he decidido descubrirme a mí mismo, lavándome el rostro y mirándome con mis ojos sobre el reflejo del agua.

 ¡Oh, Padre mío! Perdóname si soy tan atrevido, ahora que estoy tan distante de ti, y de mis lagrimas que hoy son raudales de ríos. 

 ¡Oh, Padre! ¿ Es cierto que desde el cielo se mira todo lo qué pasa en este mundo de infortunio? ¡Oh, Padre de mí amor! Mira mi duelo y hazme merecedor de llevar tú linaje.