Un Fantasma Trascendental

 

 Rómulo era un arqueólogo muy respetado en su país, su vocación y su alma de aventurero lo habían llevado a diferentes partes del mundo y desafiando toda clase de climas, gobiernos, culturas y hasta rufianes. Había excavado muchas ruinas arqueológicas, pero la que más le causaba asombro y pasión era sin dudas la civilización Maya, que comenzaba en lo que hoy es Yucatán México fronterizo con Guatemala, extendiéndose por todo Mesoamericana, ósea Centroamérica, hasta llegar a una parte de Costa Rica, más al Sur extendiéndose por otros imperios muy importante uno de ellos Los Incas.
 Romulo hacía tres meses de haber arribado a Copán, situado al Occidente de Honduras, él tenía la esperanza de encontrar más vestigios o al menos indagar más sobre lo ya encontrado y tal vez resolver las incógnitas milenarias. Hacia tres días que había divisado un indígena en espesa vegetación no muy lejos donde él se encontraba trabajando aunque sólo era esporádicamente le había llamado mucha su atención ya que era muy diferentes a los descendientes actuales, mas aún en sus pocas vestimentas y la forma que miraba todo, un asombro total;  al cuarto día de nuevo lo vio y decidió ir tras él, entró en la espesa vegetación y luego llegó un viento huracanado, sintió miedo y quiso regresar pero era imposible encontrar el camino de regreso, empezó a llover y caer truenos, se refugió en algo que parecía ruinas ancestrales para pasar la tormenta, pero su sorpresa fue enorme cuando se dió cuenta que allí mismo estaba el indígena con taparrabos y una lanza, Rómulo se quedó congelado del susto, pero el indígena le hizo una señal para que pasara, Rómulo haciendo un gran esfuerzo entró, el indígena le hizo otra señal para que se sentara enfrente de una fogata que él había hecho, Rómulo se sentó y luego el indígena se sentó enfrente de él, solo lo separaban la fogata de un intenso color. El indígena empezó hablar en su dialecto que Rómulo conocía muy bien, le dijo: tú eres Rómulo has tomado una decisión y yo la mía, Rómulo lo interrumpió diciendo: Como sabes mi nombre y como sabes que vendría aquí? Él le dijo: en mi plano existencial hay muchos tiempos y lugares a la vez, uno de ellos es la existencia de muchos futuros por cada persona y todos son reales, depende del cuál tu decidas vivir, mi pueblo fue nombrado Maya, fuimos un pueblo adelantado a nuestra época si no fuera por el dominio de nuestras mentes que nos hizo entorpecer nuestro adelantos, habían otros pueblos y en nuestra propia comunidad personas que nos hicieron retroceder, querían gobernar nuestras mentes ya que de otra manera no podían, se inventaron lo que ellos le llamaban dioses eran los que iban a regir nuestras vidas para ser sometidos, muchos de nosotros nos dejamos seducir por ese encanto, nos obligaron hacer la guerra a otros pueblos, lo que después se le llamaría en otras civilizaciones guerras santas, eran los que se comunicaban con esos dioses nos decían cuales eran sus mandatos y así empezó una guerra encarnizada pueblos contra pueblos y hasta en nosotros mismos, anteriormente nuestros propios descubrimientos eran sobre el como nos inducía lo que ustedes le llaman matemáticas, descubrimos el tiempo y mucho más sorprendente el plano astral y existencial, podíamos ver muchas cosas desde ese punto en particular y como todo convive desde allí, nuestra propia naturaleza del ser, como todo nos conlleva a un mismo punto de partida y nuestra convivencia con el gran creador, amo y señor de todo, pero nuestra perversidad y nuestra vanagloria nos pone obstáculos entre nosotros mismos, creando y dominando nuestras mentes, así vivimos por años con viviendo entre la ciencia y lo perverso hasta llegar a un punto de intolerancia y autodestrucción. Romulo le pregunto: Por que me dices todas esas cosas? Tu eres un descubridor e historiador, tu deber transcribir la historia, y dar a conocer que los mismos errores de antes son de hoy, no importando los pueblos ni lugares, lo peor es ser dominado por el mismo hombre del mismo nivel, recuerden que el que le da el poder a un hombre es otro hombre, así pues la única salvación es el uso de razón, el sentido común y sobre todo el bien colectivo de todos, no les den poder a lo perverso, la injusticia y mucho menos a la manipulación insensata y cruel, recuerden que hay muchos futuros todos depende al cual tu decides...Rómulo le preguntó por su nombre, el indígena le dijo: HUNAB KU (En Español significa: El Centro del Universo).