- ¿Es extraño para ti todo ahora?
- ¿Fue una desgracia?
- ¿Fue un infortunio?
- ¿Fue una accidente?
- ¿O simplemente tu hora había llegado?
- ¿No recuerdas tus últimos minutos?
- ¿Qué es lo que te condujo hasta allí? - aquella noche hasta el parque de las rosas; ¿Fue el amor? - ¿La Ilusión? - Pero solo exhalabas suspiros perfumados de tu alma...
Ni una hoja susurraba, no se oía ni una pisada, todo el mundo paralizado, todo en calma, como en un sueño; ¿Y tu? ¡Ah, Sí! ¿Tú? ese es tu mundo ahora... De repente todo cambia, tus ojos, la luz de perla se apaga; el perfume de las rosas muere en silencio de la auras; los senderos se oscurecen para siempre; expira toda esa vida, que hoy pertenece a tu pasado, todo huye, todo muere, todo pasa....
Y solo se ve entre sombras aquellos ojos, ¡Oh, amada! Que tristeza extrahumana, ¡que irreal! - otra leyenda de un amor ¡fatal! - Qué misteriosos dolores, que sublime esperanzas, que mudas renunciaciones, expresan aquellos ojos que en las sombras fijan esas miradas... A través del espacio y el tiempo te deslizas, por esa avenida sin senderos, te deslizas, ideal, mística y blanca; te deslizas, te alejas como un fantasma; tu mirada flota, solo tus ojos perennes, tus ojos de hondas miradas, fijos quedan; como dos estrellas apareadas, dobles en el oscuro cielo, solitarias; y en el día se ocultan, así como se ocultó tus esperanzas.
Quien diría que todo acabaría, como acaba en la sombra la claridad del día; fuiste la luz que encendió mi vida, de pronto se apagó, pero sigue encendida en mi vida. Fuiste un río ilusorio, un canto en el desierto, pero floreció en la arena, algo inédito; ahora mi alma se convirtió en un hosco y no sueña más, por no soñar contigo
El día mas feliz, la hora mas dichosa, los ha conocido mi corazón agotado y marchito; siento que ha desaparecido ya mi mas altas esperanzas de orgullo y poderío.. ¿He dicho de poderío? ¡Ja! ¡Si! pero desde hace largo tiempo; Oh, memoria ¡enemiga mortal de mi descanso! Que desde mi juventud tenía grandes sueños de grandeza, dominio hacia otros y sobretodo ¡Soberbia!... pero ¡dejémosle que se desvanezcan! No me daba cuenta que la virtud es perseguida continuamente por las malas personas para destruirla, pero es acogida y amada por las buenas personas.
¿Y mi Orgullo? ¿Qué haré de ti ahora? ¡Otra mente puede bien heredar el veneno que me has dado! Por lo menos mi espíritu permanecerá tranquilo; Porque esa que muchos la llaman "Fortuna" es una mujer borracha y antojadiza, y sobre todo ¡ciega! así no ve lo que hace, ni sabe a quien derriba.
El día mas hermoso, la hora mas feliz que mis ojos hayan visto y hayan podido ver jamás, mi mas brillante mirada de orgullo y poderío; todo eso ha existido pero ya no existe, lo siento.. Y si esa esperanza de orgullo y de poderío me fuera ofrecida ahora, acompañada de un dolor semejante al que experimento, ¡no quisiera revivir esa hora brillante! Porque bajo su ala lleva una oscura mezcla de remordimientos, arrepentimientos y soledad; ¡déjala caer esa amarga esencia todopoderosa sobre los mortales! ¡Oh, dioses! para que ellos conozcan que es no tener conciencia, ¡Que consuman sus mentes y sus almas! como aquella ¡alma mía! que tan bien la conocía...
Gritamos y nos responde el ecos! No es mas otro que nuestro propio pueblo! - Pero no es todo, nuestras voces proféticas se levantan para siempre en nosotros y para aquellos que siempre anhela con ímpetu deseo de: paz, justicia e igualdad. Reinamos en sus ingenuos corazones, y lo mejor! - que han dejado en nuestra manos sus miserables destinos.
Para el pueblo, nuestras promesas son voces fuertes de poder! - Oh! sortilegio mas eficaz, como aquellos que el rey de Judea enseñó en los jardines de Gethsemani! - tración, resignación, confianza y esperanza; Oh! qué encantos tan poderosos! - mas aún cuando sus ánimos se caldean cuando señalamos a alguien que está en nuestra contra o ideales. Aquí donde el falso monarca profana y hace que su pueblo se incline sin necesidad de armas ni amenazas, tan solo con sutileza desliza sus palabras encantando aquellos corazones ignorantes... y así se prostituye el poder, pasando como un siniestro relevo los falsos monarcas, que no tienen recuerdos ni memoria cuando irrespetan la confianza. Pero se ensalzan los héroes pasados, como un recordatorio de lo que nunca fueron, o debería haber sucedido.. Pero callad! porque el pueblo lo ignora.... así sea:
- Toda nuestra gloria!
- Todo nuestro prestigio!
- Todo nuestro alto renombre!
- Todo el misterio que moran entre nosotros!
- Y sobretodo! por todos aquellos secretos olvidados, sea por siempre nuestra Gloria!!!
En la Oscuridad de la noche, bajo la mística Luna; un blanco vapor llamada neblina, y un rocío que exhala de su halo de oro; dulcemente filtrado por la cumbre tranquilidad de la montaña, resbalada, perezosa, y armoniosa; un bello contraste de ese inmenso valle. Las flores silvestres adormecen sobre su tumba... ¡Oh, brillante princesa! - ¿Por Qué tomasteis ese camino? - ¿Por Que te dejaste engañar? - ¿O fue tu infinita ingenuidad? - los espíritus juguetones, desde lo alto de los árboles siguen el mismo sendero, como un triste recordatorio de aquellos que todavía siguen siendo seres, pero carente de cuerpo, se convierten en turbas de magos, revoloteando en el espacio de tu eterno descanso, tan fantásticamente, tan tímidamente, tan abruptamente.... por encima de tus párpados cerrados y franjeado; bajo el cual se esconde tu alma adormecida, que sobre el piso su sombra se levanta, y desciende como una ronda fantasmal.
¡Querida niña!- ¿No tienes miedo? - ¿Con Qué sueñas? - has venido ciertamente al lugar equivocado; aunque eres una maravilla para los árboles de este jardín; extraña es tu palidez, extraño tu vestido, extraño tu cabello, pero extraño sobretodo aquel silencio solemne.
¡Ella duerme! ¡Oh! - puede que su sueño sea tan profundo como perdurable; ¡que el cielo la tenga en su santa guarda! - ¡Y que sus seres queridos rueguen por su eterno descanso! Mientras que a su alrededor los fantasmas de oscuros velos, siempre erraran contra ella.
¡Oh, Mi bella flor! - ¡Que tu sueño eterno sea profundo! - su alma se envuelve con la bruma y se hunde en el reposo; ¡miren a la niña! - Cómo aparece en el lago de los olvidos, que en su eterna infancia lanza tantas piedras ociosas como le sea posible.
- ¡Toda belleza duerme!
- ¡Venid a ver donde reposa!
- ¡Caperucita! Mira el umbral que será una ventana a los cielos....
Aquella niña andrajosa, sucia de vestimenta, pero pura de corazón... que vivía pidiendo limosna de casa en casa, de barrio en barrio, de corazón a corazón. En el umbral la hallaron al despuntar el día; con una manita apretando una moneda, con la otra manita en dirección de las estrellas, y un nudo en su corazón.
Nadie sabía quién era, ni de dónde venía; pero, A quien le importaría? Cada cual con su vida! Cada cual con su dicha! Cada cual con su desdicha!
Su sonrisa era mueca de la desilusión, y en su corazón tenía el sello amargo de la melancolía, perpetuado con dos ojeras de barro; en su pequeño cuerpo dejó el rastro del hambre, su mirada apuntaba el cielo estrellado, lo supieron los astros... del cielo llovió estrellas, para no perturbar su paz... nadie supo quien era la niña, ni que le paso, solo de testigo fue la noche cálida, los luceros y el arroyo turbio...
